Estamos llegando prácticamente ya a las dos últimas semanas del año 2.013 y nos metemos en el 2.014, año en que muchos edificios sevillanos se verán obligados a pasar su inspección técnica conforme a la ordenanza actual.
Tras un año 2.013 más o menos tranquilo, con relativamente pocas inspecciones realizadas debido a la no obligatoriedad de presentarlas, recordamos los años 2.011 y 2.012 y nos vemos nuevamente en un incremento de la afluencia de edificios a inspeccionar.
El año más movido que yo recuerdo en cuanto a inspecciones técnicas en la ciudad fue 2.011, un año donde personalmente no parábamos de ofertar presupuestos y hacer inspecciones, si bien es cierto que no se hicieron las suficientes, ya que como sabemos (o si no, lo recordamos) hubo que dar una prórroga a los edificios que debían haber sido inspeccionados y no lo fueron.
Esa prórroga era de un año más, pero parece que no surtió efecto. En 2.012 se hicieron menos inspecciones de las esperadas. De hecho, es más que probable que edificios que debían haber sido inspeccionados en principio antes del 6 de julio 2.011 a estas alturas no hayan sido inspeccionados aún.
Y como novedad desde que empezó este año 2.013 tenemos las tasas. Antes, muchos propietarios y comunidades eran reacios a hacer la inspección por motivos económicos. Pues ahora hay que abonar tanto honorarios profesionales del técnico que inspecciona como las tasas municipales que varían entre 25 y 95 euros que dependen de la forma de presentación del informe ante la Gerencia y de la superficie construida de la edificación (ver BOP, en su página 50).
Dicho lo cual, estamos expectantes a ver cómo reacciona la ciudadanía ante el nuevo cumplimiento de plazo obligatorio que tenemos dentro de seis meses escasos.
Esperemos que la respuesta sea mayor que otros años, evitando así sanciones y problemas en los edificios.
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